El instante más largo del mundo

20.03.2014 20:21

“Te quiero”. Apenas había tardado un segundo en decir aquellas palabras, pero le costó una eternidad decidirse a pronunciarlas en voz alta. Hacía mucho que las sentía pero, sencillamente, tenía miedo. Más que miedo, pánico. Terror a equivocarse, a no ser correspondido… , a tantas cosas. Su “Te quiero” sonó tan rotundo como un disparo en una noche tranquila. Salió de su boca de manera vertiginosa. Después sólo quedó el silencio. Le pareció escuchar el zumbido de una mosca, el aleteo de sus alas diminutas, escuchó los ladridos de algunos perros que a lo lejos parecían felices y las voces que se multiplicaban en la calle, tapándose unas a otras, ocultándose. “Te quiero”, dos palabras que resumían tantas cosas. Pero su silencio… levantó la vista, hasta entonces clavada en el suelo, hasta sus ojos. Y al ver su sonrisa supo que el tiempo es cuestión de perspectiva. “Yo también te quiero”, dijo ella apenas un instante después. El instante más largo del mundo.