En tu ausencia

01.03.2014 09:55

Siempre pensé que no habría futuro si tú no estabas. Me equivoqué. Me equivocaba. Te marchaste y en tu ausencia el cielo cayó por completo sobre nuestras cabezas. Sobre mi cabeza. Todo se nubló y el día se convirtió en noche eterna pero, al final, cuando ya parecía que no había nada más por lo que luchar, el sol se abrió camino entre la oscuridad. Primero con timidez, con miedo. Después con seguridad, con certeza. La vida siempre se abre camino, o eso dicen. Pensé que moriría si tú no estabas. Volví a equivocarme. En tu ausencia me hice fuerte, me hice dura, me hice insensible. Aprendí a lidiar con la vida, esa enorme putada que el destino nos pone por reto. Aprendía a luchar con mis miedos. Y a vencerles. En tu ausencia aprendí a ser yo misma. Pensé que no podría volver a dormir sin sentir tu respiración junto a la mía. Me equivocaba. Aprendía a vivir sin aire, sin oxígeno. Sin nada. Aprendí a nadar en un mar plagado de tiburones. LLoré tanto cuando te fuíste de mi vida que me quedé sin lágrimas. En tu ausencia aprendí a reír, a levantar tras cada caída, a correr detrás de cada rayo de sol cuando llegaba la noche, a ser feliz con tus recuerdos a mi espalda, a pesar de ellos. En tu ausencia, esa prolongada ausencia elegida, no impuesta, aprendí a no echarte de menos. A no necesitarte. A no recordarte apenas. Ahora vuelves lleno de promesas... Siempre pensé que no habría futuro si tú no estabas. Ya lo ves. Ya me ves... me equivocaba.