La vida misma

29.04.2013 11:56

Mil vidas habían pasado desde que alguien les presentó en algún lugar de su memoria. No recordaba cuándo ni porqué motivo, pero la atracción fue inmediata.  Instantánea. Nada más rozarse supieron que pasarían toda su vida juntos. Luego, la vida misma fue la encargada de separarles, de destrozar con saña todo aquello que habían construido. De echar abajo su historia. De demoler con sádico placer las pequeñas columnas que sostenían sus vidas. La vida hace esas cosas. Más tarde, siglos después quizá, volvieron a encontrarse y la misma pasión demoledora les asaltó. Les inundó sin piedad. Con deleite. Esta vez, se dijeron tendrían más cuidado al poner la base de sus cimientos. Esta vez le esconderían a la vida la felicidad absoluta que les consumía. Hay cosas que es mejor no decir.