Un instante

24.10.2013 10:20

Siempre le pasaba lo mismo. Se enamoraba de tipos insustanciales a los que ni siquiera conocía y dejaba pasar,  sin siquiera mirarlos, a todos aquellos que merecían la pena. No soportaba dejarse querer demasiado por la misma persona y siempre tuvo claro que acabaría sola en ninguna parte. Siempre le pasaba lo mismo. Era un barco sin faro al que le traía sin cuidado llegar o no a buen puerto. Por eso, justo por eso, cuando se enamoró por primera vez no supo reconocer qué le pasaba. Se le revolvió el estómago y el corazón se le desbocó del pecho. Pensó que estaba enferma. Moribunda. Tal vez loca. No podía ser tanto jaleo por un chico tan anodino como aquel. Pero cuando el estómago y el corazón se ponen de acuerdo, poco tiene que hacer la cabeza en semejante batalla. Siempre le pasaba lo mismo. O tal vez no. Nunca más volvió a separarse de él, aunque su relación sólo duró un instante, tal vez menos, no pudo olvidarlo jamás.