La duda

20.03.2014 15:35

Tenía sus dudas. ¿Existe alguna manera de no tenerlas? Tal vez, pero él dudaba de casi todo y esto no iba a ser una excepción. Todos le decían que podría hacerlo, que estaba en su mano lograrlo porque él era capaz de eso y de mucho más. De todo. Le gustaba oírlo, pero no lo creía. No. Ni mucho menos. Se trataba de una tarea titánica y, aunque no se sentía orgulloso de ello, un cansancio viejo e infinito se apoderaba de todo su ser con tan sólo pensarlo. Tú puedes, le decían. Y él respondía con una sonrisa, y la duda era cada vez mayor. Tú puedes, y la losa sobre su cabeza aumentaba de tamaño y de peso. Y con la losa sus miedos. Sus inseguridades. Sus debilidades. ¿Podría llegar a hacerlo? El camino se hacía cuesta arriba con tan sólo pensarlo. Tú puedes, le repetían, y él se tapaba los oídos con las manos, deseando poder salir corriendo de allí. Huír y perderse en la voluntad de los que han perdido las ganas de luchar. “Tú tienes que hacerlo. Tú debes hacerlo”, le dijo ella sin apartar la vista de sus ojos. ¿Por  qué?, le preguntó él sin poder apartar los suyos de su rostro. “Porque yo creo en ti”. No hizo falta más. Comenzó a caminar sin mirar atrás. Alguien le dijo que el camino se hace andando y él ya tenía un motivo para hacer posible lo imposible.